Postillas de coyuntura - 002/24
Bogotá, febrero
Antecedente
Ola de calor en todo el territorio nacional, el fenómeno del niño anunciado con anticipación hace presencia.
El último reporte de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres[1] (UNGRD) indica que, en lo que va del año, se han registrado 576 incendios forestales en el país y se han liquidado 570[2]. Entre los departamentos que se han visto más afectados se encuentran Antioquia, Santander, Magdalena y Cundinamarca. Se advierte de posibles racionamientos de los servicios públicos de luz y agua.
Para reflexionar
La naturaleza hace parte del medio ambiente, y de ella proviene el agua que es vital para todo ser viviente en este planeta, pues si está dejara de existir en la tierra se acabaría la vida, o al menos la vida como se conoce hasta hoy; de ella se desprende el oxígeno, elemento indispensable para que haya vida en la tierra; este planeta es un ecosistema perfecto, pero si desaparecen las condiciones necesarias para que se mantenga, desaparece y se acaba la vida.
El ser humano habita en este planeta y disfruta de las cosas buena que el Creador le ha entregado. El ser humano no ha creado las condiciones de vida en el planeta lo decimos con certeza porque el ecosistema tiene un diseño que permite su mantenimiento en el tiempo, y las cosas se dan como deben darse porque Dios lo dispuso así. Decimos esto, porque nosotros no las hemos creado y alguien superior si lo ha hecho. Así, como un carro no se hace solo, el mundo tampoco se pudo hacer solo. Pero en aras de ser grato con todo lo que se ha recibido, la pregunta es ¿Nos corresponde dar algo? vamos a recibir y no vamos a dar nada a cambio? Son interrogantes que nos lleva a pensar que por lo menos debemos cuidar, conservar y porque no decirlo proveer esas condiciones necesarias para mantener ese entorno en el cual se desarrolla la vida en el planeta tierra. Este lugar del universo, que ha sido designado como nuestro lugar de residencia, requiere del compromiso de todos para subsistir, así que debe existir un compromiso real y verdadero en su mantenimiento y protección.
¿El agua es suministrada por la naturaleza y es claro que sin ella no podemos vivir, entonces que debemos hacer para no contaminarla o dañarla? El agua es el soporte del cuerpo humano, y este no puede vivir si ella. Así que hay que cuidar las fuentes de agua porque estas se pueden secar sino se ayuda a conservarlas.
La tala de árboles indiscriminada sin los reemplazos ocasiona deforestación en la tierra, y se rompe el ciclo natural de la vida en el planeta y todo tiende a tornarse desértico. Por eso es importante la siembra de árboles y la creación de bosques para ayudar a que el planeta se sane y pueda recuperarse para mantener la vida de los seres que dependen de esté para vivir.
El oxígeno también se puede afectar por la destrucción de la capa de ozono, que se encuentra alterada por diferentes químicos y gases, que van a la estratosfera y afectan el oxígeno que requiere la especie humana y otros seres vivos y vegetales para la vida.
Las plantas de tratamiento de aguas residuales, debe ser un objetivo básico de los políticos de turno que cuentan con la posibilidad de tener injerencia en una zona geográfica que puede ser cuidada y recuperada.
Las autoridades en general no están haciendo lo suficiente por controlar los diferentes desechos líquidos y sólidos que en toneladas se producen y van a desembocar en las quebradas, ríos, lagos y mares.
Conclusiones
Cualquier situación medioambiental, que perturbe la tranquilidad, la salubridad, la seguridad de la comunidad, se convierte en un motivo de policía que requiere pronta atención de los encargados del poder y la función de policía dentro de un estado de derecho[3].
La no atención, oportuna y la puesta en funcionamiento articulado del estado en sus diferentes niveles para atender con diligencia y oportunidad estas situaciones, ocasiona serios vacíos en el concepto de seguridad ciudadana que se materializan en acciones de fuerza por parte de la comunidad para lograr la respuesta, vigilancia y solución efectiva a la amenaza que los pone en riesgo y genera alertas de peligro.
Pese a que se ha evolucionado bastante en la atención y prevención de desastres y calamidades públicas, siempre el estado esta un paso atrás, en materia de prevención y atención oportuna ante la aparición de la amenaza ambiental.
El medio ambiente en donde se desarrolla la vida, cuesta mucho; apreciémoslo, amémoslo, respetémoslo, en razón a que de él depende nuestra existencia.
[2] Información UNGRD a 12:00 horas del 030224
[3] Código Nacional de Policía y Convivencia – Ley 1801 de 2016
